lunes, enero 11, 2016

Escuela de mis ancestros




Escuela de mis ancestros ( afternoon tea in london)


Convencido, al haber recibido la señal, me inunda la idea en búsqueda de aquella semilla flotando y girando en mi vaso con agua.

Con un tono medio – aquel que limita entre la introspección y el pensamiento en alta voz - esbozo un ruego, “la existencia de lo agrio”.

Allí fue donde reconocí esta señal, la que deseché y que pasado algunos momentos arrepentido busco y busco. 

Las recomendaciones sobre la atención a estos amuletos cotidianos, llámese reflejos destellantes en broches lumínicos, pestañeos oscuros revelando el extravagante resultado del luminol, llevaron a la perdida de toda esperanza del sabor. Solo el recuerdo de alguna vaga teoría retrasaría la atención de antiguas señales. 

En la jadeante y constante búsqueda, exultante, decido consultar el remoto y empolvado registro familiar de señales en desuso, en vano la intuición, la más valorada herramienta en la escuela de mis ancestros, no desprende ni emite algún impulso donde rescatar datos, algún dato cualitativo; - solo un momento inspiro entre los espacios de estos latidos - y ni un atisbo, ni un indicio del perfume del limón.


R.Sienra 01/2016

Ballard una autopsia del futuro interior.